El 21 de Junio dimos entrada a la temporada del verano, y aunque el clima tropical no nos ayuda a diferenciar entre calores primaverales y calores veraniegos, nuestro cuerpo sí que siente la diferencia y las consecuencias de una mala hidratación, bajo tales temperaturas.
Consecuencias de la deshidratación
Entre algunas de las consecuencias leves e intermedias de la deshidratación están:
- Fatiga
- Aumento del ritmo cardíaco
- Mareos
- Vómitos
- Dolor de cabeza
- Disminución del rendimiento físico y mental
En gran parte de los casos en que se presentan personas con de deshidratación, no ha sido hasta que llegan con algunos de los síntomas que éstas se percatan de su estado.
Esperar que “el cuerpo pida agua” es un grave error.
La licenciada en Nutrición, Florencia Cardone, miembro de la Asociación Argentina de Dietistas y Nutricionistas (AADYND), explica que: “La sed es un mecanismo tardío del organismo para recuperar el balance de líquido que ha ido perdiendo normalmente, a través de la orina o la transpiración.
En verano, esperar a sentir la necesidad para recién tomar algo puede llevar a la deshidratación y convertirse en un problema para la salud”
Consejos para mantenerte hidratado
1- Pon alarmas a lo largo de tu día, como recordatorio para beber agua
¡Usemos la tecnología para algo que nos beneficie!
Pauta en tu móvil, algunas alarmas / recordatorios a lo largo del día, así no tendrás como excusa válida el hecho de que “se te olvida”
2- Come alimentos que contengan mucha agua
Las frutas y verduras siempre sacan a relucir sus altos beneficios para nuestra salud.
En este caso, la ingesta de frutas como la sandía, piña, manzana o melón, y verduras como el pepino, brócoli o lechuga, son opciones altamente recomendadas.
3- Evita salir en las horas de máximo calor
A pesar de que los “momentos de máximo calor” aparentan ser las 24 horas del día, es entre las 12 meridiano y 4 de la tarde en que el sol reluce y abrasa con mayor intensidad.
Procura que durante estas horas tu actividad no sea muy intensa, mantente en zonas frescas, bajo sombra y, de igual modo, ingiriendo líquido con frecuencia.
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4- Opta por jugos, café e infusiones
Si no te gusta el insípido sabor del agua, y es tu principal motivo por el que “olvidas” tomar agua, puedes optar por jugos naturales, café e infusiones, para variar, pero no sustituir del todo la ingesta de agua en su estado natural.
5- Limita la ingesta de bebidas con contenido alcohólico
Durante temporadas de calor, controlar la ingesta de alcohol es altamente recomendable, por el simple hecho de que el alcohol tiene un efecto deshidratante.
Por tanto, aunque siempre tienes la oportunidad de sustituir el agua por cualquier otro líquido con un sabor más atractivo, cualquier componente con alcohol está fuera de las posibles opciones.
Estos consejos son simples formas de mantenerte hidratado en tu día a día.
Si en algún momento sientes alguno de los síntomas relacionados con la deshidratación, procura acudir a profesionales de la salud para recibir la atención requerida.
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