Su Efecto en la Regeneración de Tejidos.
La planta Hamamelis es originaria de norteamérica y ampliamente difundida en Europa por ser uno de los mejores tónicos venosos que nos brinda la naturaleza.
Ellos la conocen como Witch Hazel (Avellano de Bruja).
Componentes de la Hamamelis
Entre sus componentes principales esta la proantocianidina, antioxidante que se aprecia mucho entre los herboristas.
Los flavonoides como el kempferol, la quercitina y la isoquercitina, también son antioxidantes. A los que se le confieren valor tanto como anti-envejeciente como en la regeneración de tejidos.
Esta planta se usa en muchos países para problemas femeninos, como bactericida y astringente en infecciones vulvo vaginales en ginecologia.
Es bien valorada en casos de sangrado abundante durante el periodo menstrual, y apreciada también en casos de dismenorrea.
De hecho el Hamamelis forma parte de SARA, formula excelente diseñada por Laboratorios Rangel para la dismenorrea.
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Sin embargo, otro problema de salud que preocupa a muchas mujeres, son las varices y flebitis. Las cuales suelen tratarse con esta planta medicinal tanto ingerida como en uso externo.
Reduce considerablemente los calambres en las piernas ya que es un regenerador celular.
El Hamamelis se ha revelado como un apoyo valido para los trastornos de insuficiencia venosa en general, donde hay dificultad en el retorno venoso.
Eso la hace valiosa no solo en tratamiento de varices, sino también en arañas vasculares y en preparados para hemorroides.
Sus taninos y flavonoides son responsables de la potente acción venotónica, aumentando la elasticidad venosa y la resistencia capilar.
En Europa tiene una merecida reputación en el tratamiento de las contusiones y las inflamaciones. Sobre todo en esa molestosa sensación de piernas pesadas.
Es una planta ideal para el cuidado de tu piel por sus propiedades cicatrizantes, antiinflamatorias e hidratantes.
Indicaciones de la Hamamelis
Se indica muy especialmente en el tratamiento de los eritemas o enrojecimiento de la piel.
Los mismos provocados por procesos alérgicos, por infecciones bacterianas, por quemaduras solares o por dermatitis; así como en llagas y ulceras de la piel.
¡Atención diabéticos!
La gran riqueza en taninos del Hamamelis explica también su uso principal como hemostático, antihemorrágico y cicatrizante.
Además para la cura de heridas con o sin sangrado, en hemorragias post-afeitado y en hemorragias nasales.
En fin, quien use el Hamamelis para dolores menstruales, se lleva el bono de salud en la regeneración celular.
Fuente: Doctor Wilfredo Mañon
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